Una de las mermeladas que más me gusta hacer en invierno es la mermelada de tomate. Es algo que me encanta!
Es algo bastante sencillo y queda muy rica para entrarle a unas tostadas con manteca, sí, siempre todo con manteca 😝
Para esto usé los siguientes ingredientes:
Lo primero qué hay que hacer es sacarla la piel a los tomates. Una técnica rápida es poner agua a hervir en una olla, hacerles una cruz apenas cortando la piel en una de las puntas de los tomates y sumergirlos en el agua hirviendo por unos 30 segundos. Luego los pasamos a un bowl con agua bien bien fría para cortar la cocción y poder retirar bien la piel.
Luego con un cuchillo retíranos la piel fácilmente, cortamos a la mitad y luego en lonjas. Retiramos la parte blanca con la mayor cantidad de semillas, cortamos en cubitos pequeños y reservamos.
Una vez todo listo, los llevamos a una cacerola y agregamos el azúcar. Dejamos a fuego fuerte hasta que hierva y bajamos a mínimo. Siempre removiendo. Dejamos destapado y que se vaya caramelizando hasta el punto de tener una textura suave y con almíbar. Acá depende mucho del gusto de cada uno.
Una vez listo. Retiramos y colocamos en un frasco para conservar. Con mucho cuidado que está caliente caliente.
Como dije, me gusta mucho en tostadas. Para una picada con quesos creo que va muy bien también. La probaron? Les gusta este tipo de mermeladas??
Podes mirar también esta tremenda receta de mermelada de pimiento rojo ahumado
Más fotos en mi Instagram